jueves, 13 de junio de 2013

Reacciones químicas

Siento la necesidad de necesitarte pues ni los más alejados vientos saben lo que siente un corazón que lucha contra todo ser viviente en este mundo.

La claridad de la oscuridad que me dices que hay a las 10 de la noche no es más que nuestras almas iluminadas esperando el momento de encontrarse. Nada tiene que ver el mundo en ello.

Los síntomas que sentimos, no son más que reacciones químicas. Cómo vas a ir en contra de la ciencia, si no puede contra ella ni el amor, ni la creencia en uno mismo.

Cómo vas a demostrarme algo que no es demostrable por muchos sitios por donde lo mires. Cómo algo que era evidente, se ha convertido en la mayor de mis pesadillas soñando despierta, sin contra que sueño dormida con sueños que luego nunca recuerdo.

No los recuerdo. No se que sentir. No se que me pasa si sólo son años. Miserables años en los que el alma fue feliz. Por qué vino a torturarme ahora. Ahora que mi interior estaba tranquilo.

Mires por donde mires, lo único que puedes encontrar son zarzas. Cómo vas a pasar, si las espinas que clavan tu corazón no son más que palabras. Cómo vas a saltar, si son más altas que tu orgullo. Cómo vas a cortarlas, si eres incapaz de dominar tu propia razón.

Cómo vas a razonar y dominar tu alma, tus sentimientos y tu alma, si no existía esa otra persona. El intelecto humano no está hecho para entender el amor. No sabe como reaccionar ante impulsos que produce nuestro propio cuerpo cuando ve a una persona y dice estar enamorado. Enamorado de qué, si la unión entre cuerpo y alma los separó Platón. Son entes aparte. No se conocen. Cómo, una sola persona, va a desmentir siglos de sabiduría.

Dime. Cómo piensas luchar contra ti mismo, si cuando te llamé no apareciste. Eso no existe.